Crytek ha recogido el testigo de Id Software, la otrora empresa amiga del estandarte gráfico y del top tecnológico en los sistemas. Id sigue en ese camino, pero tenemos que admitir que ha perdido algo de fuelle después de Rage y la compra del grupo por ZeniMax. Los alemanes por tanto destacan en ese campo y han captado la atención de los jugones con sus obras.
Far Cry fue su ópera prima y Crysis 1 su confirmación. Ese juego estuvo hasta hace bien poco por delante del resto en la faceta técnica, un adelantado a su tiempo por varias razones: Detalle del escenario, filtros, texturas y distancia de dibujado, entre otras muchas cosas. A día de hoy, todavía dejaría en vergüenza a otras supuestas bombas técnicas. La segunda entrega renovó el control del nano-traje y mostró escenarios más pequeños, obviamente se trató de un recorte lógico e impuesto por la salida del producto en PS3 y Xbox 360. Con la RAM de las consolas no se podía hacer mucho más. Crysis 3 es en su campaña una iteración que juega en ambos mundos o al menos lo pretende. Análisis a continuación.
Apartado técnico
Creo que no hará falta extenderse demasiado en este campo. Crysis 3 es un portento técnico en PC, prácticamente todo brilla en esa versión, pero hará falta un equipo avanzado para sacarle partido al juego. A nivel de texturas (algunas), partículas y efectos se puede tomar como una demo técnica de las consolas de nueva generación (PS4 y Durango). No podemos olvidar que en PC podremos correr el juego de forma relativamente sencilla a unos 50fps, lo cual es un plus.
En consola decepciona al compararse con la segunda parte. En Crysis 3 se ha ampliado el tamaño de los escenarios y el mapeado, por tanto en algunas ocasiones podremos recorrer escenarios de grandes dimensiones. Ese aspecto ha obligado a incluir texturas de baja calidad, a reducir los efectos de luz y empobrecer cierta pirotecnia (explosiones). En muchos aspectos la definición de los elementos deja que desear. Esta es una crítica dura, lo admito, porque ofrece mucho, pero Crysis 2 al ejecutarse en entornos más controlados, llamaba más la atención, era más potente en menos elementos, ahora sigue siendo potente, pero ha repartido recursos. Con todo, saca partido a las consolas, mucho teniendo en cuenta que solo tienen 512MB de RAM.
Respecto a la segunda entrega diría que se han mejorado los efectos climatológicos y el modelado facial de los personajes secundarios. Igualmente el inicio de Crysis 3 es arrollador, el escenario contiene todas las bondades que hacen del juego un producto a tener en cuenta en la faceta técnica.
El motor gráfico en consolas es medianamente estable, pero tenemos zonas en las que se ralentiza (segundos). Esto se da en algunos momentos puntuales de la campaña y siempre que llegamos a un checkpoint, una pena esa bajada en el rendimiento, ya que en consola sospecho que no llega a 30fps de forma estable, se acerca, pero no alcanza esa suavidad. Arrastra el leve fallo en la carga de texturas de la segunda parte, pero es algo menos marcado y más sutil (no siempre aparece y otras veces puede pasar desapercibido).
En general muy bien, con ciertos puntos flacos, pero bien.
Jugabilidad
Siempre me ha gustado la jugabilidad de Crysis, el núcleo jugable centrado en el nano-traje. En realidad se trata de alternativas, de formas de encarar las diferentes situaciones de una forma ágil, directa y sobre todo sencilla. Cada uno puede optar a salir de una situación de una forma concreta o mezclar las habilidades para ir pasando de una a otra modalidad conforme avanzamos en la campaña.
En ese sentido es igual a Crysis 2, no inventa nada nuevo, pero sigue siendo muy entretenido jugar con el traje, sentirte un superhombre capaz de todo. La campaña a grandes rasgos es similar, pero ampliada por el aumento en el tamaño del escenario. Tenemos que recorrer una distancia mayor hasta nuestro objetivo, tendremos misiones secundarias (opcionales a realizar) y otras principales (y obligatorias), todas siguen el hilo de la trama.
En este caso contamos con dos desequilibrios principales. El Traje y el arco. En el traje se ha aumentado el tiempo que dura cada habilidad y se han eliminado algunas penalizaciones. Por lo que ahora será muy fácil encarar a los enemigos, la habilidad de invisibilidad es una locura, muy descompensada. Además, si los enemigos adivinan nuestra posición será tan sencillo como retroceder un poco, recuperar energía, volvernos invisibles y encararles sin ser vistos. En estado de armadura, Prophet tendrá un gran aguante, más que antes. Si a todo esto sumamos el arco es un cachondeo. Esta arma en invisible no penaliza la energía del traje y su capacidad destructiva es muy elevada. Seguimos sumando, bastará con matar a un enemigo, retroceder ligeramente para recargar energía e ir a por otro, sino se pueden eliminar varios enemigos del tirón, da tiempo y no penaliza el que matemos a su compañero. A diferencia de usar un arma con silenciador, ya que con esto si entran en un estado de alerta. El nivel de dificultad es bajo, es sencillo y por ello recomiendo pasarse el juego en el más elevado, excepto en un par de secciones no os costará mucho avanzar. En cualquier momento puede reducirse la dificultad, pero no aumentarla, por ello os recomiendo empezar con la más alta y adaptarla a vuestro juego en sentido decreciente, ya que no será posible hacerlo de otra forma (y sería un coñazo empezar de nuevo).
La campaña en si está menos ajustada que en la segunda parte, los enemigos están más diseminados, son menos agresivos y no encontraremos tiroteos tan frenéticos. Tendremos momentos muy divertidos y energéticos, pero no tan entretenidos y destructivos como en Crysis 2. Añado que el nivel de producción es inferior, ya que está plagado de errores. Enumeremos: Bugs que impiden que podamos correr o agacharnos, pequeños desniveles en el escenario que atascan el avance del jugador, exceso de hackeo (el sistema es levemente divertido, pero deberían haberse incluido varios mini-juegos y no uno). Errores en checkpoints (te devuelve a la zona con poca munición, vuelves a morir y apareces con todo), resbalones en el diseño de niveles (las fases de conducción cuentan con errorcillos inexplicables, de morir en un checkpoint, volver a la partida y morir sin saber que ha ocurrido, no te dan tiempo para entrar en situación y comprender la amenaza). Decisiones en el control (durante el hackeo si nos atacan, el jugador no saca el arma directamente, debes forzar el sistema de hackeo, salir del submenú y sacar el arma, demasiado tiempo), mal posicionamiento de los iconos de avance (a veces es imposible saber la dirección concreta a la que debes ir o existe un exceso de iconos en la misma al usar la herramienta de Prophet), algo caótico.
Con todo reitero que tenemos momentos muy buenos, pero en ningún momento se llega a los niveles de diversión de Crysis 2, ya que todo es más sencillo y los enemigos nunca llegan a suponer una amenaza, podemos con todo y todos con relativa facilidad. Es una pena ver esos fallos en la campaña y comprobar que no está demasiado cuidada, quizá se ha priorizado con el multijugador y es una pena, porque Prophet es un gran personaje principal y las armas, en especial las alienígenas molan mucho. Si se hubiese profundizado más, sería el mejor Crysis.
Multijugador
En este caso este apartado ha mejorado respecto al anterior juego. Se ofrece una experiencia multijugador con las funciones del nano-traje como principal reclamo. Destaca por el buen uso que se le puede dar al traje, muy inteligente para ganar terreno al contrario y la evolución en las habilidades del personaje, consecuente en la subida de facultades del traje. Los mapas se han diseñado teniendo en cuenta el tiempo de funcionamiento de las habilidades del traje y se ha optado por incluir diferentes partes en las que podremos hacer uso de una u otra habilidad. Este punto aumenta nuestras posibilidades de encarar al grupo contrario y liquidarlo.
No hace falta extenderse, simplemente probarlo y creo que puede suponer una alternativa ligera frente a Call of Duty y Battlefield, ya que ofrece una experiencia de juego diferente y muy rica basada en algo diametralmente opuesto a lo que proponen las dos licencias mencionadas.
Sonido
Una gran producción, como una película en términos generales. Bien en FX, normal en la BSO, demasiado genérica, sigue faltando uno de esos temas que directamente se asocien a Crysis y no a cualquier película con Hans Zimmer en la BSO, tan repetitivos desde La Roca.
Los bugs se repiten en esta sección. Tenemos zonas donde el sonido se apaga, no suenan las armas, las explosiones o los enemigos, es decir, cuenta con partes mudas (es algo que puede durar un par de segundos o afectar a algo concreto como la recarga de la pistola). Un fantasma que ya aparecía en Crysis 2 y que vuelve a darse en esta tercera parte. No hace falta decir que queda fatal y corta la inmersión.
Conclusión
Crysis 3 es un producto de acción notable, heredero de los errores de la segunda parte y responsable de otros nuevos. La campaña está desequilibrada por el aumento del tamaño de las zonas, las habilidades del traje y el arco. Este cóctel con mucho alcohol es capaz de transformarnos en un dios contra el resto. Espolvorear con algunas decisiones cuestionables en el control y por la falta de momentos frenéticos o irrespirables por la presión enemiga y tenemos un preparado apto para todas las clases, pero no un imprescindible en los sistemas.
Acción con descosidos y con fugas por los bugs y esa falta de cariño en la campaña. Creo que en esta ocasión se ha querido más a un hijo que a otro y el multijugador es el elegido. Globalmente entretiene y es un bello producto en la faceta visual, pero esconde sinsentidos en su armazón. El nano-traje sigue siendo llamativo, entretenido, una idea que todavía esconde potencial.
Puntuación: 7+
Crysis 3 ya a la venta para PC (42.70€), Xbox 360 (61.65€) y PS3 (61.95€).
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